martes, 9 de enero de 2007

Eddie A. Ramirez S. // Irrevocable

http://opinion.eluniversal.com/2007/01/09/opi_673_art_09A821555.shtml

Irrevocable, según la primera acepción del Diccionario de la Lengua
Española, significa que no se puede dejar sin efecto una concesión. El
ministro Lara prefirió aplicar el término para recalcar que la resolución
arbitraria de revocar la concesión a Radio Caracas Televisión, nuestro canal
primado, era un hecho consumado. Esta decisión era inevitable ya que un
régimen como el actual, totalitario hipercalórico, tiene que controlar a los
medios de comunicación para influir en la mente de los ciudadanos.
Gradualmente lo está consiguiendo, en la televisión ya cuenta con Venezolana
de Televisión, Vive, ANTV, Telesur y próximamente con CMT. En la radio
prácticamente se adueñaron de la banda AM y en el interior muchas emisoras
FM fueron adquiridas por personeros o amigos del régimen y otras están
siendo estranguladas económicamente. Con la prensa existe por ahora cierta
tolerancia porque en nuestro medio no está muy marcado el hábito de la
lectura, pero es evidente que los anuncios oficiales prefieren a los
periódicos afectos.

No hay convivencia posible entre la democracia y el totalitarismo y ningún
demócrata debe manifestar respeto por decisiones que lesionan la libertad de
expresión. Para intentar impedir que la revolución sea revocada el régimen
requiere disponer de las armas, del dinero, de los medios de comunicación y
de la educación. Ya controla a la Fuerza Armada y a PDVSA, ahora tiene que
terminar de controlar a los medios y está iniciando el asedio al sistema
educativo. Para demostrar su fuerza, el teniente coronel se volvió a
uniformar y, rodeado de sus pretorianos, anunció urbi et orbi que RCTV era
golpista y que ello justificaba la no renovación de la concesión del Estado.
Como el comandante dixit, todos sus acólitos lo respaldan alegremente sin
percatarse que es una medida que puede revertirse en contra de ellos. En
este sentido es lamentable la posición sumisa de Eleazar Díaz Rangel, otrora
prestigioso periodista a quien el comandante debería haber premiado con el
Ministerio de Información, al igual que hizo con Jorge Rodríguez por
servicios prestados. Por su parte, los timoratos callan con la vana
esperanza de que si pasan agachados no les pasará lo mismo. Desde estas
páginas proponemos un silencio de 24 horas de la prensa, de la radio y de la
televisión que estén alineados con la democracia, con el objeto de
solidarizarnos con nuestro Canal 2 y su trayectoria de 53 años y para dar
una clara señal al mundo de nuestro repudio al totalitarismo. Nuestra
vocación democrática sí es irrevocable.

eddiearamirez@hotmail.com

No hay comentarios: